miércoles, 30 de junio de 2010

Los mejores y los peores presidentes norteamericanos

Diversas instituciones publican de manera periódica encuestas efectuadas entre académicos para determinar el "ranking" de los mejores y peores presidentes de la historia de Estados Unidos.

La más reciente la ha publicado el Siena Research Institute, midiendo una serie de atributos de los presidentes (desde su formación hasta la "suerte" que tuvieron) que se someten a la valoración de los académicos.

Los resultados no son especialmente sorprendentes: los primeros cinco presidentes son:

- Franklin Delano Roosevelt (que sacó al país de la Gran Depresión y dirigió la victoria en la Segunda Guerra Mundial)
- Theodore Roosevelt (que se enfrentó a los grandes trust y creó la red de parques nacionales)
- Abraham Lincoln (que dirigió al país durante la Guerra de Secesión, salvó la Unión y liberó los esclavos)
- George Washington (el primer presidente, y el general que dirigió la Guerra de la Independencia)
- Thomas Jefferson (el tercer presidente, que en su juventud redactó la Declaración de Independencia).

Los cinco últimos son (empezando por el último):

- Andrew Johnson, que con su política tolerante hacia los sureños tras la Guerra Civil permitió la instauración de la segregación racial.
- James Buchanan, que con su pasividad propició la secesión sureña.
- Warren G. Harding, que nombró a una infinidad de cargos corruptos durante su breve mandato (1921-1923).
- Franklin Pierce, el predecesor de Buchanan, que con sus actos también ayudó a la futura Guerra Civil.
- George W. Bush, que desequilibró la economía norteamericana, embarcó a su país en dos guerras, una de las cuales cuanto menos de forma moralmente cuestionable, y acabó presidiendo sobre la crisis más seria desde la Gran Depresión.

Bush ya ha dicho en alguna ocasión que confía en que su valoración mejore como tambíen lo hizo la de Harry Truman, que hoy en día suele ser mencionado como uno de los diez mejores presidentes. Es evidente que la valoración de George W. Bush puede cambiar con los años, pero también parece evidente que no lo hará de forma muy acusada, y que probablemente siempre se hallará en la mitad baja de la tabla. Las virtudes de Truman (en materia de lucha anticomunista, de inicio de la lucha contra la segregación racial, etc), que quizá no fueron apreciadas en su tiempo, ahora suelen ser objeto de elogio entre los historiadores. Resulta difícil, aunque carecemos de perspectiva histórica, ver cómo se puede articular una rehabilitación política de George W. Bush de semejante calibre.

Por lo que pueda valer, Obama está valorado en el puesto 18º (o sea, en la mitad superior de la tabla), pero realmente es muy pronto para llegar a una conclusión definitiva sobre su presidencia, que apenas lleva año y medio.

Para quien tenga interés en estas cosas, aquí puede hallar un resumen de diversas encuestas realizadas en torno a este tema desde 1948. Como se puede ver, hay bastante uniformidad en ellas: Lincoln, Washington, Jefferson, los dos Roosevelts, Truman o Eisenhower reciben de manera reiterada buenos resultados.

Entre las curiosidades: un cierto declive a lo largo de los años en la valoración de los primeros presidentes demócratas, como Andrew Jackson o Martin Buren, una ligera revalorización de la presidencia de Ulysses S. Grant (aunque la misma sigue siendo inferior a la media), un ligero retroceso en la valoración de la presidencia de Woodrow Wilson (totalmente justificada en mi opinión: su racismo y su doctrina de redistribución étnica de las fronteras han causado grandes daños a lo largo del siglo XX).

Una vez que nos adentramos en las presidencias más recientes, hay más ruido y confusión, y probablemente no podremos obtener una opinión asentada hasta que los historiadores que no conocieron personalmente a los presidentes sean los que respondan a las encuestas.

¿Quién fue el mejor presidente? Mi opinión personal siempre es la misma: Lincoln, por el enorme desafío que supuso la Guerra de Secesión, las dificultades que halló en mantener unido a su propio cabinete y al Norte durante la guerra, su integridad y decencia personal, y por supuesto, la emancipación, una de las grandes gestas de la historia de la humanidad. Es interesante, por ejemplo, que la encuesta de Siena, en su penúltima columna, le pide a los historiadores que digan cuál es su "present overall view" (o sea su opinión global a día de hoy). Pese a que la media de todos los demás parámetros deja a Lincoln en la tercera posición, los historiadores, al preguntárseles directamente, le otorgan el primer lugar a Lincoln. Es sintomático.