En la quinta entrada de nuestro análisis de la participación en las elecciones catalanas de 2017, pasamos ahora a estudiar el comportamiento de la provincia de Barcelona, empezando por la capital.
Recordemos nuevamente los datos esenciales: el incremento de la participación en las elecciones catalanas de 2017 fue asimétrico, en el sentido de que de cada 100 votantes abstencionistas o primerizos que pasaron a votar, 44 aproximadamente votaron a partidos independentistas, y 56 a partidos unionistas.
La participación en toda Cataluña en los comicios de 2012 pasó del 74,95% al 79,09%. En Barcelona, el incremento de participación fue muy similar: se pasó del 75,03 al 79,32% (en otras palabras, Barcelona prácticamente marca la media catalana, lo que es lógico dado su tamaño).
En lo que respecta a la comparación del número de votos, con los datos extraídos de la página web de la Generalitat, sería la siguiente:
Bloque independentista 2017 (ERC, JXCAT, CUP): 1.446.002 votos
Bloque independentista 2015 (JXSI, CUP): 1.368.250 votos
Diferencia: + 77.752
Bloque unionista 2017 (C's, PSC, CCPodem, PP, Recortes Cero): 1.794.380 votos
Bloque unionista 2015 (C's, PSC, CSQP, PP, Unió, Recortes Cero): 1.675.879 votos
Diferencia: + 118.501
Porcentaje del incremento del voto independentista sobre el incremento total en 2017: 39,62% (77752/196253)
Porcentaje del incremento del voto unionista sobre el incremento total en 2017: 60,38% (118501/196253)
Al contrario que en las otras tres provincias catalanas, sólo el 44% de los barceloneses votaron a candidaturas independentistas, y el 54,61% votaron a candidaturas unionistas.
En términos del incremento de participación, el resultado es más marcado si cabe: si en toda Cataluña por cada 44 independentistas anteriormente abstencionistas o votantes primerizos que fueron a votar, 56 unionistas anteriormente abstencionistas también lo hicieron, en Barcelona las proporciones son algo distintas, más favorables al unionismo.
Al igual que en las otras tres provincias, el incremento de participación no fue homogéneo en toda la provincia. De hecho, la provincia de Barcelona tiene tres áreas bastante claramente divididas a ese respecto: la ciudad de Barcelona (ligeramente unionista), su área metropolitana (la región más unionista de Cataluña) y la Barcelona interior, prácticamente indistinguible de la Girona y la Tarragona interior o de la provincia de Lleida (menos su capital) en su independentismo.
En esta entrada analizaremos con detalle los resultados en la ciudad de Barcelona (28,98% del total de la provincia):
En esta entrada analizaremos con detalle los resultados en la ciudad de Barcelona (28,98% del total de la provincia):
Bloque independentista 2017: 419.185 votos
Bloque independentista 2015: 414.150 votos
Diferencia: + 5.035
Bloque unionista 2017: 485.998 votos
Bloque unionista 2015: 452.512 votos
Diferencia: + 33.486
Porcentaje del incremento del voto independentista sobre el incremento total en 2017: 13,07% (5035/38521)
Porcentaje del incremento del voto unionista sobre el incremento total en 2017: 86,93% (33486/38521)
Como se puede ver, el incremento del voto unionista en la ciudad de Barcelona fue uno de los más elevados en toda Cataluña.
Lo que resulta quizá más fascinante de todo es que la propia ciudad de Barcelona parece un microcosmos de Cataluña. Véase la distribución del voto de los 10 distritos de la ciudad de más a menos independentista:
- Gràcia (57,91-41)
- Eixample (52,68-46,33)
- Sants-Montjuïc (47,21-51,59)
- Les Corts (46,8-52,29)
- Sarrià-Sant Gervasi (45,45-53,5)
- Ciutat Vella (44,78-53,57)
- Sant Andreu (43,97-54,79)
- Sant Martí (43,78-54,97)
- Horta-Guinardó (43,64-55,02)
- Nou Barris (30,21-68,35)
- Gràcia y el Eixample son los únicos distritos mayoritariamente independentistas.
- Todos los demás distritos tienden al unionismo (en Nou Barris de manera aplastante), pero lo más interesante es que en los últimos 10 años el distrito más pobre (Ciutat Vella) y los dos más ricos (Sarrià Sant Gervasi y Les Corts) se han decantado por el unionismo, cosa que al principio del periodo no ocurría.
Pese a ese hecho, el incremento de la participación no se repartió de la manera que uno hubiera podido esperar superficialmente:
- En Gràcia, el Eixample, Les Corts o Sarrià Sant Gervasi (distritos en los que JXCAT es el partido independentista dominante), el voto independentista se redujo en números absolutos.
- En los restantes distritos (en los que ERC es el partido independentista dominante), el voto independentista se comportó mucho mejor. En Nou Barris, por ejemplo, el incremento del voto independentista fue el 48,21% del total.
En resumen: Barcelona en su conjunto viró hacia el unionismo, pero ello ocurrió en particular más bien en los barrios acomodados (y curiosamente, más independentistas), mientras que en los barrios menos acomodados la tendencia fue mucho más matizada.
En la próxima entrada, el área metropolitana de Barcelona, que es, como decimos, la región más unionista de Cataluña.
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